06/05/2013 – Inaugurada la exposición “Paisajes de La Montaña”

El pasado jueves 2 de mayo inauguramos la exposición Paisajes de la montaña alicantina. Hasta la Casa de Cultura del Campello se acercaron numerosos amigos y amantes de la fotografía que quisieron acompañarme en tan importante ocasión, consideración que agradezco profundamente. La inauguración la hicimos sin parlamentos, a pelo, de una manera muy natural y distendida, mientras tomábamos un vino y escuchábamos, de fondo, la música de al-Ándalus. Después, salimos al ágora y visionamos dos proyecciones audiovisuales donde los barrancos, montañas y valles fueron los protagonistas.

La exposición consta de 20 fotografías, de las que 5 pertenecen al término municipal del Campello, en la frontera sur de La Montaña. Pese a que la torre de l’Illeta y la de Reixes son posteriores al siglo XIII (se construyeron mediado el XVI), quise conferir protagonismo a estos dos hitos paisajísticos para que los campelleros tuvieran la oportunidad de contemplarlos bajo unas condiciones lumínicas diferentes a las que acostumbran a hacerlo y se identificaran con ellos. Esto me impidió titular la exposición como hubiera deseado: “La Montaña Azul: los paisajes que contempló el visir al-Azraq”, título que rescataré cuando termine la novela y la exposición visite el corazón de La Montaña.

Las fotos se acompañaron de una cartela con el título de la obra, la localización, un texto alegórico y los datos técnicos de la toma. A decir por los comentarios, parece que los textos gustaron, lo que viene a confirmar que la literatura y la fotografía, en su justa medida, caminan bien de la mano.

Uno de los aspectos que más me ha sorprendido de la exposición ha sido lo mucho que ganan las fotografías cuando se presentan montadas al aire, sin cristal, enmarcadas con un paspartú. La impresión es que las fotos han gustado; esta sensación la extraigo del tiempo que la gente invierte en recorrer la exposición, de los debates que las fotos suscitan, del ensimismamiento que algunas imágenes provocan en algunos espectadores y de los fotógrafos que la han visitado por recomendación de otros.

Os dejo con “Fantasía otoñal”, la niña bonita de la exposición.

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